“Monreal se alinea: ‘La agenda de Sheinbaum es la prioridad

Por Bruno Cortés

Ricardo Monreal, uno de los operadores políticos más experimentados de Morena, dejó en claro que la Cámara de Diputados está lista para entrar de lleno al segundo año legislativo con una sola consigna: respaldar, sin titubeos, la agenda de Claudia Sheinbaum.

Durante la reunión plenaria con legisladoras y legisladores de la Quinta Circunscripción en Puebla, Monreal fue claro: “Este equipo es muy leal a la presidenta, no va a titubear en sacar adelante su agenda”. Detrás de esa frase hay algo más profundo que simple disciplina partidaria: Morena y sus aliados —el Partido del Trabajo y el Verde— están preparando el terreno para un paquete legislativo ambicioso que, según adelantó, incluirá al menos 30 nuevas leyes, reformas constitucionales y ajustes legales clave.

Y no es cualquier paquete. Están hablando del Presupuesto de Egresos de la Federación 2026, la Ley de Ingresos, la Miscelánea Fiscal y reformas de fondo en materia judicial, electoral y penal. Todo esto, según Monreal, será definido en coordinación directa con la presidenta, con quien tendría una reunión de trabajo ese mismo día.

La reunión en Puebla, dijo, es la primera parada de cinco plenarias regionales donde Morena afina su estrategia legislativa. Pero no se trata solo de planear qué leyes presentar. También están enviando un mensaje político: Morena arranca el nuevo periodo ordinario en unidad interna, en sintonía con Sheinbaum, y con la intención de mantener el control del ritmo legislativo.

Monreal hizo un repaso de lo que han logrado hasta ahora: en solo un año aprobaron 18 reformas constitucionales y 57 reformas legales. Algunas suenan muy técnicas, como la Ley de Amparo, pero muchas tocan temas que sí afectan directamente a la gente: vivienda social, movilidad, ascensos militares, adquisiciones públicas, seguridad, justicia, e incluso bienestar animal y derechos indígenas.

¿Y qué viene? Monreal mencionó reformas que ya se cocinan en varios frentes: cambios al sistema judicial, una posible reforma electoral, ajustes al Código Penal para homologar la ley contra la extorsión en todo el país, y temas más actuales como el control del vapeo o la salud pública.

Pero no todo fue política nacional. También hubo tiempo para hacer política local. Monreal se deshizo en elogios para el gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, a quien le reconoció haber recuperado la tranquilidad del estado y poner los intereses sociales por encima de los de grupo. En tono de camaradería, le aseguró que contará con el respaldo total de los diputados de Morena para continuar implementando las políticas de la Cuarta Transformación.

Por su parte, Armenta devolvió el gesto asegurando que su gobierno sigue al pie de la letra los principios del movimiento que los llevó al poder. En resumen, Puebla se vuelve también un ejemplo del modelo que Morena quiere mostrar: gobernabilidad, coordinación entre poderes y continuidad en el proyecto.

Con el arranque del periodo ordinario a la vuelta de la esquina, Morena se muestra cohesionado, con agenda en mano y voluntad política para mantener su dominio legislativo. Monreal, como siempre, juega su papel: traductor entre la calle, el Congreso y el poder presidencial. Y este año, su libreto está escrito desde Palacio Nacional.