México y California fortalecen cooperación militar con nuevo acuerdo
La Secretaría de la Defensa Nacional dio un paso relevante en la relación militar con Estados Unidos al firmar una carta de intención con la Guardia Nacional de California, con el fin de integrar a México al Programa de Colaboración Estatal, un esquema diseñado para intercambiar capacidades, entrenamiento y experiencias entre fuerzas armadas de distintos países.
Por Juan Pablo Ojeda
La Secretaría de la Defensa Nacional dio un paso relevante en la relación militar con Estados Unidos al firmar una carta de intención con la Guardia Nacional de California, con el fin de integrar a México al Programa de Colaboración Estatal, un esquema diseñado para intercambiar capacidades, entrenamiento y experiencias entre fuerzas armadas de distintos países.
Este acuerdo se enmarca dentro de la Visión Estratégica Mutua de la Mesa Redonda de Cooperación Bilateral Militar, vigente entre México y EE.UU. desde 2016, un espacio donde ambas naciones buscan afinar mecanismos de seguridad y defensa sin cruzar las líneas de soberanía que históricamente han sido sensibles.
Con esta incorporación, el Ejército, la Fuerza Aérea y la Guardia Nacional de México tendrán la oportunidad de trabajar de manera más directa con la Guardia Nacional de California a través de visitas recíprocas, ejercicios conjuntos, intercambio de experiencias y adiestramiento especializado.
Más que un acuerdo militar tradicional, este programa subraya principios que ambos gobiernos colocan como base: reciprocidad, confianza mutua, responsabilidad compartida y respeto pleno a las decisiones y territorios soberanos. En otras palabras, se busca mejorar la capacidad operativa de ambas fuerzas sin vulnerar las fronteras políticas ni los límites constitucionales de cada país.
Para México, el beneficio principal radica en el reforzamiento de sus capacidades tácticas y operativas a partir de prácticas comparadas con una de las guardias estatales más experimentadas de Estados Unidos. Para California, el intercambio ofrece una oportunidad de entender de primera mano los desafíos de seguridad que enfrenta México y enriquecer su preparación con escenarios distintos a los que atiende en su territorio.
Aunque es un acuerdo técnico, tiene un peso político importante: muestra que la cooperación bilateral en materia de seguridad continúa avanzando, a pesar de los cambios de gobiernos y de las tensiones que a veces surgen en la agenda bilateral.
